“Dale un pescado a un hombre y comerá un día, enséñale a pescar y comerá siempre” - Confucio

Próstata. Cómo paliamos sus dolencia

La próstata es un órgano del tamaño de una castaña que se sitúa por debajo de la vejiga y que se encarga junto con las vesículas seminales de generar el líquido seminal donde pueden sobrevivir los esprmatozoides. Es un órgano vital para nuestra reproducción como especie, y por lo tanto hay que cuidarla.

El cáncer de próstata es una enfermedad silenciosa cuyos síntomas se confunden con otras patologías prostáticas, por ese motivo es importante la visita periódica al urológo. Solo así se puede diagnósticar en fase temprana un cáncer y distinguir entre los síntomas irritativos, dependientes de la vejiga obstruida y muy molestos pero que no matan (urgencia miccional, aumento de la frecuencia miccional, orinar por la noche, incontinencia por imperiosidad…) de los propiamente obstructivos (chorro flojo y prolongado, dolor al orinar, micción en dos tiempos) que molestan menos pero a la larga matan por infecciones de orina que pueden provocar sepsis y retención de orina que puede originar insuficiencia renal, causas de muerte muy frecuentes en la antigüedad en nuestros lares y aún muy presentes en el Tercer Mundo por falta de profesionales que realicen diagnósticos correctos.
Estructura de la próstata